sábado, 28 de julio de 2012

EL OTRO PERÚ QUE BUSCA SU "MARCA"


“Todo peruano, por el solo hecho de ser peruano, tiene derecho a gozar de lo maravilloso de ser peruano”, son las  palabras del primer documental “Marca Perú”, lanzado por PromPerú. Luego, aparece el documental de Loreto de Italia en estos últimos días para hincharnos el pecho de orgullo, mandarnos por las nubes con  las riquezas y costumbres  que tenemos y sentirnos que tenemos “el mejor país del mundo”. Sin embargo, cuando termino de verla, empieza una inevitable pregunta en mi cabeza ¿por qué hasta Nebraska? ¿Por qué hasta Italia? Acaso en el mismo Perú, donde vivimos, ¿no hay personas que no conocen lo nuestro y ni vieron este documental? Emociona verlo, sí, pero lo mejor sería sentirlo, cosa que es difícil porque nuestra realidad nos muestra todo lo contrario.

Caricatura: Alvaro Portales

Ver a personalidades como “Sofí”, Gastón Acurio, Carlos Alcántara,  Gonzalo Torres en dos oportunidades,  es sinónimo, en el documental, de que los peruanos contamos con esas actitudes, porque ellos nos representan, frente a los ciudadanos del pueblo “Peru” (sin tilde) en  Nebraska, quienes se llevan una perspectiva porque no saben mucho de nosotros. Entonces queda una pregunta que tildarán de “chauvinista” pero es real ¿Por qué los que nos representaron, en su mayoría, eran de test clara? De repente nos estamos encontrando en una etapa de transculturización o fueron esos personajes para que el documental se vea más “estético”. De repente se percataron de ello y “trataron” de ser equitativos con el segundo documental de Loreto en Italia

 “Marca Perú”, demuestra un punto de partida para la polémica y reclamo de los sectores populares y necesitados de nuestro país, que en muchos años buscaron ser escuchados y atendidos en sus necesidades básicas para sobrevivir, pero (lo más probable) al ver este documental, recibieron como una cachetada ya que observaron cómo grandes personalidades, campeones  y representantes de nuestro país, se fueron a difundir nuestra cultura a EE.UU. y no tomar una combi para irse a Villa El Salvador (donde algunos hogares desayunan té con galleta), un lugar que necesita de la cultura y costumbre peruana porque se está formando como ciudad.

Hoy se celebra 28 de Julio en nuestro golpeado Perú, muchos haremos honor a esta Marca Perú, otros ni se darán la molestia de recordarse de ello, ya que conocen la marca real que les deja el durísimo día a día por salir adelante y sobrevivir ante las desigualdades que hay entre dos países, que cada día se acrecienta más: “Marca Lima” y “Marca Provincia”.  Ellos deberían ser celebrados, deseados con un feliz 28, pero mejor aún, deberían ser la Marca Perú en los documentales porque no tendrán grandes logros que salgan por tv, pero conocen lo que es la vida real de nuestro país. 

Esperemos que para la próxima hagan un “Marca Perú”, no  EE.UU, Italia, Europa o Asia, sino que se den el tiempito de tomarse un ómnibus e irse a los lugares más necesitados de nuestro país, para darles a conocer lo que tenemos, informarles y decirles que no están solos, para lograr el sentido y concepto de vivir en Perú. Además, contribuir a que no caigan en la ignorancia, que muchas veces llevan a la alienación y pérdida de nuestra cultura, aquella que lograron grandes hombres. Y  que algunos no han encontrado la marca que los identifica como peruanos. Amén.




Caricatura: Alvaro Portales



miércoles, 25 de julio de 2012

UN SUEÑO DE LA REALIDAD QUE NO SOÑABA


Despertó y estaba llorando. Las lágrimas le caían incesablemente, mojaba su bata y su mejilla estaba roja como las rosas al amanecer. Las sábanas se encontraban en el piso y no entendía porqué. Trató de volver a sus sueños y se asustó. Recordó que tenía sangre en las manos; esa sangre caliente y muy roja que emana el hombre al ser asesinado. Trató de levantarse y ponerse sus pantuflas, empezó a caminar, tratando de olvidar esta pesadilla. Todo estaba oscuro. Al llegar a la puerta, alzó su mano para encender la luz, sin saber que esa claridad le mostraría una realidad que no era un sueño.

Su cama estaba llena de sangre, las paredes, el piso, la puerta y sus delicadas manos. ¡No podía creerlo! , no entendía si estaba soñando o era realidad lo que vivía. Lloró con mayor intensidad, con dolor y confusión. Trató de cerrar muy fuerte los ojos y derrepente poder despertar, confirmando así que todo era solo un sueño. No lo logró. Desesperada, salió de casa con su pijama y pantuflas puestas; corrió por toda la calle hasta llegar a la laguna Azul. Hacía frío, estaba nublado y el paisaje estaba casi oscuro. Seguía llorando, llorando hasta que se secaron las lágrimas.

Sentada ella, vio algo flotando en la laguna: Era su amado, quién estaba muerto.
Pensó estar loca, que él no era su amado, sino otra persona; tenía tanto dolor y confusión en un mismo momento que le dieron ganas se suicidarse. Y así fue, se levantó y regresó a casa, con frío, asustada y medio extraviada. Al llegar a su hogar, se fue inmediatamente a la cocina, en busca del bendito cuchillo con que se mata a los animales perversos. Buscó en la mesa, entre los cubiertos, los platos. No lo encontró.

Pasó algo insólito, se quedó nublada, cegada, pasmada, como si el tiempo se hubiese detenido y todo estuviese en girando a su alrededor: Había recordado algo más de su sueño. Volvió a llorar y se dirigió a su cuarto, con los brazos caídos, con el corazón adolorido. Al llegar, encontró el cuchillo en su cama, increíblemente. Había entendido lo que hizo en realidad. Mató a su amado por temor a que la abandone. La laguna Azul era el lugar donde lo mató porque ahí surgió el amor. Luego de asesinarlo, volvió a casa, fue a la cocina, cogió el cuchillo y terminó suicidándose en su cama.

Nicole sabía que estaba muerta y lo que era real fue su alma, que deambulaba en busca de su amor que nunca la dejó, sino que ella quiso tenerlo para siempre.




miércoles, 18 de julio de 2012

¡HACIA LA PLAZA SAN MARTIN!: FOTOS DE LO QUE NO SE VIO EN LA MARCHA CONTRA "EL PROYECTO CONGA"




         La Plaza Dos de Mayo, lugar de concentración para la marcha contra el
Proyecto Minero Conga y la banderola que fue traida desde Cajamarca.




Resguardo policial y la banderola cajamarquina en la ciudad de Lima



Mario Huaman, la congresista Rosa Mávila, entre otros representantes de diversos
 partidos políticos




Estudiantes de la Universidad Nacional de Cajamarca, presentes en la marcha en Lima



Las mamás no tuvieron problemas en llevar a sus hijos en esta marcha contra
 el proyecto de Yanacocha


Muchas veces, ellos son lección de vida. La discapacidad física no es un problema;la discapacidad mental, sí.




La banderola que es llevada por la Av. Tacna en señal de unión y apoyo al departamento de
Cajamarca


Este es el significado de la marcha en Lima. Lamentablemente, otros incidentes hicieron que la prensa  ignore esta petición.




El "eterno" adulto mayor, reclamando lo que el alanismo y fujimorismo les arrebató:Su aporte por muchas decadas con el sueño de un futuro mejor.



Llegada a la Plaza San Martín. La alfuencia de público fue similar a la de la Marcha por el Agua,
 hace medio año.




Jorge Rimarachín, los Congresistas Rosa Mávila y Javier Diez Canseco,
presentes en la tribuna central, tomando fotos.


El motivo( las pintas y enfrentamiento) de la "gran prensa" para desviar la intención
de la marcha en Lima y termine siendo su noticia central: "Ni un muerto más".Una más del "periodismo objetivo"


Los casi 20.000 mil manifestantes que estuvieron presentes en la Plaza San Martín. Es un claro hecho que en Lima hay muchas personas con sentido común contra la imposición minera;
el proyecto Conga, por ejemplo.


martes, 10 de julio de 2012

FOTOS Y MOMENTOS:NUESTRO PERÚ DEL SIGLO XX

 Así era el Perú en el siglo XX, según el sociólogo SINESIO LOPEZ, quién realizó un ensayo sobre  la disputa entre políticos e intelectuales, quienes intentaban legitimizar el poder social en nuestro país. Por otro lado, las fotos del fotógrafo, ya fallecido, DANIEL PAJUELO nos muestran las consecuencias de esas disputas en los años 90.
Entro al portón general de la Casa O¨Higgins y me dirijo al segundo piso. Al llegar, me llevo una gran sorpresa con el título que presenta la exposición de Daniel Pajuelo: “La Calle es el Cielo”. Incrédulo, pensé que sería sobre fotos abstractas o imágenes fuera de lo común. Sin embargo, una primera imagen me sorprende y me deja estupefacto: Era un cerro de El Agustino y había una foto con un niño durmiendo en la combi. Era tal cual como si la hubieran tomado ayer, pero con un poquito menos de resolución. Había entendido de lo que trataba, era una exposición de la Lima cotidiana. La Lima que es blanco y negro, de día y de noche. La Lima que ha demorado en cobrar su color, desde hace más de 50 años.
Foto:  Daniel Pajuelo

 Ya estando en el segundo pabellón, sigo viendo las imágenes de personas que nunca conocí, de lugares que nunca pisé, de momentos que nunca viví, pero aun así, sentí como si fuera parte de cada captura que se transmitía, gracias a las imágenes de Daniel. Su intención era captar los momentos cotidianos de la Lima urbana y rural. También, buscaba reflejar cómo se encontraba socialmente Lima en los 90 y qué cambios hemos percibido  hasta ahora. Lamentablemente, poca es la satisfacción de ver una Lima mejorada y uno de los motivos me lo haría saber Sinesio López.

Foto: Daniel Pajuelo

Saber que los intelectuales y políticos de los años 60, solo tenían la intención de legitimizar a una clase- la dominante- y consolidar una posición de unas cuantas personas -según Sinesio López-  sin poner interés por realizar los cambios por la construcción de la Nación o del Estado, deja a la luz que los problemas de fondo solo se tocaban cuando el país entraba en crisis. Además, conocer que se dejaba de lado los pedidos o problemáticas que presentaba la sociedad, hace cuestionarse: ¿cómo entender la intención de querer cambiar nuestro país, si los intelectuales y políticos solo se preocupaban por el orden más no por el tipo de Gobierno?



Cámara de Daniel Pajuelo


Las consecuencias de estas disputas, diferencias entre políticos e intelectuales, hizo que la población empezara a desconfiar de los partidos políticos, de los intelectuales e iniciaran otra alternativa de ser escuchados. Es así que encuentran una alternativa en los sindicatos, por ejemplo, quienes se encargarían de expresar los problemas sociales, económicos y educativos de ese entonces. ¿Sirvió para solucionar los problemas en esta nueva década que vivimos? No lo creo.
 Cajamarca, con el Proyecto Conga y el conflicto que se detuvo -por el momento- en la Provincia de Espinar, son muestras de que las personas encargadas de transmitir las peticiones –políticos, líderes e intelectuales- de la población, no realizan esa función y más se dedican a consolidar intereses personales. Un “Gregorio Santos”, buscando un puesto en el Gobierno. Un “Víctor Valdés”, velando por el cumplimiento de las peticiones de las transnacionales, son claros ejemplos de que el pueblo o la masa, quedará  a la deriva - una vez más- tal como lo afirmó Sinesio Lopez.
Si Daniel Pajuelo estuviera vivo y tomara las fotos en los mismos lugares donde los capturó en los años 90, la diferencia no sería mucha, ya que el cambio más notorio que podría tener, es que la cámara tendría un mayor zoom de la realidad pero pocos “píxeles” para poder agrandar los lentos cambios que ha habido en nuestra sociedad.

Imagen: Implementos del fotógrafo, DANIEL PAJUELO
Foto: Alexander Gutierrez Alarcón

jueves, 5 de julio de 2012

CHOSICA: A UN AÑO DE LA DESGRACIA

Recuerdo que era, maso menos, las 4:30 de la tarde de aquel 5 de abril del 2012 donde empezábamos Semana Santa. Estaba descansando, con los ojos legañosos, abrigado con las frazadas y no tenía ganas de levantarme porque hacía mucho frío. Afuera, el cielo se mostraba nublado, con un color medio gris, olor a humedad y los vecinos sin querer salir de sus casas por la lluvia que había empezado a caer. Mis padres se encontraban haciendo las cosas de todos los días: limpiar, hacer los avances de sus trabajos y dar de comer a las mascotas. Sin embargo, un ruido muy intenso, que iba en aumento, hizo despertarme de un salto. La lluvia empezó a caer con gran intensad que ni la radio se podía escuchar.  
                                                 
“¡Huayco! ¡huaico!”,de la desesperación, empezaron a gritar mis vecinos. Razón tenían ya que no había pasado ni una hora desde que empezó a llover intensamente y las calles de mi barrio ya estaban inundadas, llenas de barro, basura que salía de todos lados. La gente empezaba a salir de sus casas con sus costales para llenarlas de arena y evitar que sus hogares se inunden. “¡Alex, sube con la lampa, el “agua” se viene para la casa. Apúrate!”, gritaba mi padre, quien se encontraba en el techo. Subí rápidamente. Solo estaba con unas sandalias, un short y un polo muy delgado que no sirvieron de mucho para protegerme. Al salir, el olor a humedad era asfixiante, mi techo se encontraba lleno de agua, consecuencia de las lluvias. No había pasado ni tres 3 minutos y ya estaba mojado completamente.
Lugar: Nicolás de Pierola- Chosica
Foto: Alexander A.Gutierrez Alarcón

Al mirar hacía mi jardín, vi que se venía lo que menos espera un poblador de Chosica: una gran cantidad de lodo, barro con basura, ramas y otros desechos se aproximaban a los hogares. Empezaban a caer los huaicos y deslizamientos de riachuelos por todos lados. Mis vecinos nos dieron el alcance para encausar el deslizamiento y evitar que más casas sean inundadas.Lo logramos pero la lluvia no paraba. Estábamos con caras de cansancio y mi calle estaba  lleno de todo, menos de lo que fue antes. Decidimos regresar a nuestra calle principal para ir haciendo un camino por donde se encausara la lluvia. Muchos vecinos fueron damnificados de las zonas bajas. Creíamos que todo había pasado, pero no fue así.
 "¡Alex, saca tus lampas y picos. Apúrate “carajo!”",  me gritaba un vecino. La lluvia había vuelto a caer en grandes cantidades y otro deslizamiento destruyó todo lo que habíamos cercado con piedra, arena y algunos tubos de desagüe. El frontis de mi casa parecía un río lleno de basura. Las casas de las zonas bajas se inundaron aún más. La desesperación de los vecinos por encausar el huayco hizo que gritaran por ayuda. Todos tratábamos de hacer algo pero poco sirvió para evitar los daños a algunas calles y hogares.
                                   Lugar: Bellavista y Mariscal Castilla-Chosica                                          
                                             Foto: Alexander A. Gutierrez Alarcón

Ya al día siguiente, nos dimos cuenta que el deslizamiento que pasó por nuestro hogares no tenía comparación con lo ocurrido en todo el distrito: Mas de 9 huaycos habían caído, dejando 2 muertos, más de 200 casas destruidas, cerca de 3500 damnificados y cuantiosos daños materiales. Chosica había sufrido una de las catástrofes más grandes desde hace 2o años. Las zonas de Bellavista, Mariscal Castilla, Inca Cola, Santo Domingo, Sauce Grande, Cooperativa Pablo Patrón, entre muchos otros, fueron los lugares donde muchas familias perdieron sus hogares. A todo esto, se suma la incapacidad del Alcalde de Chosica para realizar labores de prevención a la población, ya que solo se atinó a colgar letreros que “desaparecieron” después de la caída de estos huaicos. Puntos aparte,Luis Bueno es alcalde por más 23 años de este distrito. Conoce muy bien los lugares en peligro ante estos desastres naturales.
Lugar: Cooperativa Pablo Patrón -Chosica
Foto: Alexander A. Gutierrez Alarcón

Ha pasado 1 año desde que cayeron estos huaicos y la recuperación sigue siendo progresiva. Algunos, tuvieron que seguir adelante con sus propios recursos, otros con el apoyo del municipio de Lima; lamentablemente, este tema se usó con fines políticos en la Revocatoria. Por otra parte, los ánimos se estabilizan pero jamás olvidaremos lo que la naturaleza puede causarnos si no estamos preparados y prevenidos. Si las autoridades no cumplen, ni advierten a la población ( quienes también deben poner de su parte) estaremos condenados a repetirla.

CURIOSIDADES: Todos, absolutamente todos los letreros de prevención"desaparecieron" cuando llegó la prensa limeña. ¿Qué se quería ocultar, en ese entonces?
Foto: Alexander Gutierrez Alarcón